17 sept 2013

Vuelta a la realidad / Gracias

Vuelta a casa y a las rutinas que dominan la mayor parte del año. Es raro, muy raro.
Este verano nos ha tratado a latigazos más que nunca. Me atrevería a decir que nos hemos acostumbrado a vivir cada día en un puteo constante.
No se puede describir lo que hemos pasado, ya no es por los turnos que sobrepasan las 40horas, las batallas nocturnas o las situaciones más peligrosas... es sobre todo porque la tónica de cada día ha sido luchar contra el fuego. Un día tras otro, sin descanso.

Y esto, (retocando una frase de Kali del anterior post) como prácticamente cualquier situación de las vividas es imposible comprenderlo o hacerse a la idea, hay que vivirlo y ser conscientes de su magnitud pero intentarlo ya es un gran paso.

Por eso tengo que dar las gracias casi emocionada a todos los que me han preguntado, se han interesado, empatizado... y en definitiva han intentado comprenderlo. Significa mucho para la gente que nos cuesta contar estas cosas porque son tan "épicas" e increibles a veces que más bien parecen ficción. Muchas veces he quitado flores al relatar vivencias de allí cuando como dice Sancho habría que estar más que orgulloso/a.

Y puestos a dar las gracias, las tengo que dar uno por uno y en mayúsculas a mis compañeros. Ahora que han pasado unos días y vuelves a la realidad echas la vista atrás y en ese resumen mental que haces destacan más las personas que el propio esfuerzo y todo lo vivido. Cada día me acuerdo de todos, estoy todavía adaptándome a mi otra vida y recuperándome de las secuales físicas y mentales.
Tuvimos la peor despedida de todas, lo que estaba planificado como un día tranquilo se convirtió en un viaje a A Fonsagrada (Lugo) que se estiró desde las 16h hasta las 7am. Las últimas horas juntos también las pasamos "combatiendo al enemigo". Fue el día que más costaba sonreir o hablar porque sabíamos que en unas horas tocaba despedirse de la gente con la cual has compartido todos los días sin descanso pasando un verdadero infierno.

Todos sois magníficos, buena gente, pura de verdad y el que no lo vea es que es gilipollas perdido. Montones de características buenas que os engloban, pero voy a deciros alguna "trapayada" a cada uno. La lista podría alargarse mucho, ya que hay mucha gente a la que aprecio de otras brigadas y sectores... pero me centro en mi manada :)

Jose, eres un ejemplo de coraje, de seguir adelante y de bondad. Has estado todos los años desde que llegué, eres un hermanazo. Dejas a los demás sin derecho a quejarse por dolores teniendo así la rodilla. No pudo aguantar el trote y nos dejaste a mitad de agosto; momento en el que había que mirar por la salud antes de llegar a puntos peligrosos. Espero que te recuperes pronto tio grande.

Diana, la alegría en persona, tienes el don de hacer sonreir a la gente en el peor momento. Eres más necesaria que muchos de nosotros. Tu también abandonaste a mitad de agosto por el hombro y la maldita intoxicación de humo. No eres consciente de lo que te hemos echado de menos, ni de coña. Nos has inflado a sms y llamadas de apoyo que nos han hecho sonreir a todos al llegar a casa. Aunque no estuvieras, estabas en cada viaje y cada incendio. Lo de llamarte duende tiene más sentido que nunca.

Julio Mena, el cachorro de este año. No se puede echar en cara que tuvieras que abandonar el barco también allá por el 20 de agosto. Has elegido el peor año para embarcarte en esta locura y ya has visto que han caido decenas de compañeros. Tienes que estar orgulloso porque le has echado un valor salvaje. Formas parte de la historia de la XVII y tienes hueco en los corazones de todos. Espero verte de nuevo hermano.

Luk, segundo año que vienes a esta locura.... y ha sido mucho más. Me alegro mucho de haberte vuelto a ver cuando lo dábamos por imposible. La experiencia se nota muchísimo y tu aparte de tenerla bien aprendida este año has vuelto a repartir compañerismo y ánimos por doquier. Eres un grande, y aún el mejor alumno!. No me extraña que alguien te fichara para la XVII a la primera que te conoció :).

Carlitos Nevi, eslabón fundamental, creo que eres la persona más compensada de todas. Tienes de todo lo bueno un poco y el equilibrio es más que necesario. Cuarto año tio... que pronto se dice, parece que fue ayer cuando eras el novatín!. Una pena que marchases al igual que Luk con la llegada de septiembre, aún quedaron decenas de batallas y os echamos mucho de menos.

Baia, el parche!!. Directa de la XIX a la nuestra para compensar las tres bajas que teníamos a mitad de agosto. Ya te conocíamos del año pasado y más aún compartiendo sala y batallas. Si había alguien que podía dar sangre fresca (aunque igual de cansada) y alegría esa eras tú. Graciñas nena por casi un mes que parcheaste la XVII.

Sancho, y la verdad no se que apelativo ponerte. A veces te odio y otras me encanta haberte conocido. Me ha sorprendido muchísimo la fuerza que has tenido aguantando absolutamente todos los días con los dos cabezas de mando. Rebosas entrega y valor, y aunque seas odioso a veces creo que todos coincidimos en que eres más que necesario aquí y en la base entera. El haber pasado a veterano te ha cambiado de verdad.

David Mellán, mi competencia fotógrafa. Me encanta que estés aquí para no se la única pesada de las fotos. Si alguna vez el karma nos devuelve todo lo que hemos hecho tu vas a ser rico. Considero que eres parte fundamental de la brigada, otra persona completa y que si te rifaran, el resto de brigadas levantarían la mano todas. Otro pilar de resistencia día tras día.

Ruce, veteranía de último grado. A lo que te manden y con brillantemente. Estar rodeado de buena gente te hace aún más majo. Eres otro que ya estaba aquí cuando llegué yo y que año tras año enseña todo lo posible a las caras nuevas. Supongo que todos tenemos cosas únicas y especiales pero unos pocos yo también opino que son insustituibles, tu estás en esa alineación.

Kali, sorprendente. Siempre has sido un conjunto de cosas buenas. Compañera, entregada, atenta, dura como una piedra... Instructora y repartidora de ánimos. Adoptas todos los roles y pones cada año el listón de mujer guerrera por lo más alto. Un auténtico camaléon capaz de adaptar el color necesario a cada ocasión. Este año nos has sorpendido a todos con tu resistencia y dureza. Sabes que te quiero muchísimo, más que a esta panda xD, si algo puedo decir seguro es que me tienes para toda la vida. Eres la ostia Kali, sin más.

Gorka, segundo al mando. Es imposible compararte con el año que pasaste a esta condición, se rompe la balanza. El corazón de la brigada, has aguantado todas las penurias siendo un ejemplo a seguir cada día y al igual que para alguien es un placer que seas su segundo para el resto es un placer que sea alguien como tú quien está también al frente siempre. Gracias por aumentar con creces el papel del jefe, tenemos una suerte enorme por tu dedicación extra.

Tamer, a ti te dejo el último porque hay que darte las gracias por absolutamente todo. Estás al mando de este grupo y eres el principal culpable de que funcione así de bien. Siempre el primero y el último todos los días y en cada infierno, palabras mágicas para todos, ánimos cuando nadie los tiene ni sabe de donde sacarlos. Atento, velando en silencio. Con lo que se ve y con todo lo que haces que no se ve, contigo esto es una piña siempre. Sinceramente no sé como narices lo haces.

Si sois amigos o lo que sea de esta gente tenéis un tesoro. Yo como dije antes echo la vista atrás y lo que más destaca son sus caras, demacradas, llenas de ceniza, heridas incluso... pero sonrien hasta en la noche más asquerosa.

A ver quién cojones hace eso.

8 sept 2013

La fuerza del momento

Hoy al llegar a la base hemos encontrado una visita peculiar. Allí estaban varias decenas de personas de diferentes edades, ya temíamos que fuese una cúpula de "bien vestidos" pero con el primer vistazo lo descartamos. Algunos lucían emblemas de ecologistas en acción, WWF y alguna asociación menos conocida. Jóvenes, adultos... de todo un poco.
Luis, Lázaro, Chema y alguno más les explicaban algo en semiluna en el patio. Mientras Goliath aparcaba se iban acercando.
Veníamos de un incendio en Queixa, no muy duro comparado a estas semanas pero inevitable cansarse y ensuciarse (La UME no se ensucia, sigo sin saber como lo harán, qué profesionales). Bajamos del camión, demacradísimos a estas alturas, mientras se oía la fuerte voz de Luis  "...Vienen derrotados de otro día más y por suerte hoy vuelven pronto...".

Terminamos de bajar todos, un poco asustados incluso por no saber que hacer rodeados de tanta gente que estaba... definición gráfica: O_O. Uno de tantos momentos que instintivamente giras la cabeza buscando al tipo alto que nos lidera y a ver que dice/hace él, pero estaba igual de perplejo.
Con todos abajo, incluido nuestro conductor Oscar, empezaron a aplaudir. Pero no el típico aplauso subnormal, uno con ganas y profundo reconocimiento en los ojos de la gente. No sabes donde meterte, sonries como un/a idiota.
Fuimos a guardar algunas cosas y a cambiarnos y asearnos un poquito porque nos dijeron que saliésemos a hablar con la gente y compartir un poco antes de ir para casa. Para lo que hay que hacer en casa este plan era genial.
Todavía en el cuarto flipándo en colores con mis hermanos/as por la situación y haciendo suposiciones de a qué se debía eso nos mandamos callar mutuamente... otro aplauso sonaba. La XXI se había replegado a la vez, seguro que era para ellos que acababan de llegar con la misma escena.
Y en efecto, ya algo más decentes cambiados de ropa salimos al patio a la vez que nos cruzábamos a la otra brigada que entraba estupefacta. Al vernos, Mingu dijo: "Habéis oído eso no?" a la par que Noa dejaba la genialidad de: "En mi vida me han aplaudido así jajaja".

Nosotros salimos y al poco rato estábamos rodeados de gente. Luis dijo a voces: "pero hombre integraros un poco que ahora no hace falta que estéis todos juntos en plan equipo", ganándose las risas de todos los presentes. Y así lo hicimos, más o menos por parejas espontáneas en el momento atendimos preguntas y recibimos felicitaciones de todo ese mogollón variopinto de personas de distintas edades. Ruce y Nara por un lado, Sancho y David, Tamer y Baia... y Gorka y yo.
No nos ha dado tiempo a intercambiar impresiones, esto será el plato principal de mañana pero si puedo decir que Gorka y yo nos lo hemos pasado genial. El grupito de gente que nos preguntaba tenía una parte estable y otros que tras unas cuantas preguntas e historias se cambiaban.
Nos preguntaron de todo con verdadero interés y te quedas helada al ver como te escuchan. En serio, esto debía de ser terapia cuando llevásemos alguna racha jodida, pero para todas las brigadas. Otras han vivido momentos emocionantes pero nosotros este año hemos estado bastante nulos... cosa de la casualidad de estar en un sitio u otro en un momento u otro... y anda que no hemos tenido movidas!.
Supimos responder a todo, sin entrar en rodeos, tecnicismos y sobre todo polémicas, que es muy fácil tirarnos de la lengua y las preguntas con morbo siempre tienen magia.
Algunas cosas que para nosotros son ya mundanas generaban una espectación terrible. Me recordó mucho la cara de los novatos al enfrentarse a sus primeras situaciones de riesgo, uno de los recuerdos que siempre destaco de aquí.
La única en la que nos quedamos bloqueados fue: "¿Y de dónde sacáis las fuerzas para aguantar esto?, porque debe haber momentos horribles".

Y aún ahora escribiendo esto para publicarlo mañana no se responder. No sé si alguien sabría dar una respuesta completa. Opino que es una mezcla de muchas cosas.
Hay buena parte física, pero la mental es superior. La propia experiencia también juega una labor fundamental a la hora de dosificarse y demás.
Está claro que las ideas de cada uno son una parte muy importante, alguien tiene que hacer esto y todos estamos aquí por esa razón y hacer un bien al monte, a la naturaleza en general, hacer algo por el planeta con nuestra mentalidad verde. La fuerza de voluntad y entrega son indispensables, el saber que eres un eslabón muy importante para la cadena de compañeros también. La gente que te rodea, con los que te juegas el tipo día a día, son otro de los pilares que te hace seguir adelante y tú les causas el mismo efecto. La sensación de un trabajo bien hecho, de haber evitado que X incendio fuese un desastre natural. La rabia por problemas personales de cada uno. Hay muchos ingredientes.

En situaciones extremas, demasiadas este verano, encuentras palabras de ánimo en superiores y haciendo piña sigues adelante. Luego, cada uno tiene sus métodos aplicables en soledad, que si no tenías terminas creando. Determinados pensamientos motivadores, pequeños ritualismos, talismanes, fotos desgastadas... cada cual tira de lo suyo.

"Sabemos a que hora entramos pero no a cual volveremos" es el cartel (mugriento ya...) que tenemos en la habitación compartida con la XIX. Cada vez que salimos, tanto ellos como nosotros, le damos un pequeño golpe a mano abierta.

Pequeñas y grandes cosas que te hacen seguir. La fuerza del momento en el que estás. No espero que nadie me entienda, porque es imposible, pero intentarlo ya es un gran paso.

1 sept 2013

Buen artículo, dentro de lo que cabe...

Casi habría que dar las gracias a C. Punzón, autor de este artículo de portada en la voz por haber tenído un mínimo detalle con los brigadistas... pero ya sabéis lo reacia que soy con este tema, sigo pensando que se menciona porque está de moda, porque no se puede ocultar y porque hay que rellenar el periódico. Interés verdadero, el justo. Desinformación, toda la que queráis. . Pero bueno, entre nada y esto prefiero esto.

Los brigadistas que luchan contra el fuego: «Ya ni sabemos en qué provincia estamos». 

Con este título abre el artículo, basado en una Heli pero perfectamente aplicable a cualquier brigada. 

"Avanzan en fila y en silencio buscando el fuego de cara. No hablan entre ellos para no gastar fuerzas y tener reservas para actuar en el siguiente incendio."

"(...) escasos cinco minutos concedidos por el jefe del grupo para darle cuatro mordiscos al bocadillo, el menú que les acompaña desde que de noche fueron trasladados a las faldas del monte Aloia para tratar de contener un fuego más, un día más y otra jornada de doce horas"

"«Parece que vais a la guerra», les grita un guardia forestal"

"(...) siempre se mantienen alineados con una numeración mental asimilada por todos para detectar al instante cualquier falta. Solo en la lucha contra el fuego el grupo se rompe en parejas, nadie puede actuar en solitario. Es una de las pocas normas."

En fin, merece ser leído.