20 abr 2016

Hora de comer

El otro día me hicieron una de las preguntas más inocentes con las que me he topado: ¿Y qué coméis para aguantar eso?.

Evidentemente, me hizo sonreir. La verdad es que no sabía muy bien por donde empezar o qué explicar y me dije a mi misma, esto debería tener una entrada en el blog.

Así pues, ¿qué se come "allí" para "aguantar eso"?. Bueno, yo creo que sería un buen comienzo separar (como siempre) los días de incendios y los de no-incendios.

Los no-incendios a su vez se dividen en dos, los que te pilla fuera de base por narices y los que se cuadran las tareas para comer en base.
Fuera, los tuppers son el mayor protagonista, generalmente con comidas básicas y muy ricas en energía que gustan a la mayoría y cuando no es así, por ejemplo en el caso de vegetarianos se tiene la delicadeza de hacer tupper-aparte. Son repartidos por personal allá donde estén las brigadas a horas cercanas al medio día. Van a rebosar, acompañadas de cubiertos de plástico resistentes y fruta de postre. La única bebida es la normal, agua y/o agua con sales. Aquarius de marca blanca.

Dentro, si se prevee "llenazo" del comedor se cuadran las tareas para que los primeros empiecen a comer a las 13.00h y luego vaya pasando gente. como muy tarde comes en el último turno de las 15.00h. Por normal general se respetan unos 40min para comer.
Aquí ya hay comida más elaborada (comida de cuchara, complementos...) y a elegir, como un buffet. Hay comida que siempre está (Pasta, arroz..) y otras que son como la especialidad del día, por ejemplo lentejas o caldo gallego. Además de la fruta típica hay otras piezas no tan problemáticas de transportar como sandía, melón... Y también hay postres, otras bebidas, posibilidad de café de cafetera... en fin, lo que sería una comida normal pero siempre más balanceada a la energía que a la pesadez en el estómago.

Ahora viene la parte dura. Cuando es un día de incendios todo cambia. No sabes a qué hora vas a comer porque no sabes cuando vas a descansar ni cuánto tiempo, y si ese descanso coincidirá con que han llegado suministros o no. Aquí hay tres posibilidades;

- Que lleguen los "tuppers especiales", que a diferencia de los otros contienen mezclas de comida con base energética y fácil digestión, como por ejemplo pasta con arroz y fruta mezclada. De llegar, llegan a medio día y transportado por personal nuestro; por viaje dedicado, o traido en cualquier sitio, por ejemplo que lo traiga otra brigada o una motobomba. La red de reparto es de lo más curiosa.

- Que lleguen bocadillos variados. Pueden llegar por la "curiosa red de reparto" de la misma manera o bien por Protección Civil. Aunque pueden aparecer al medio día son el principal plato para la noche. Papel albal envolviendo el bocata, fruta.... y a una bolsa de plástico corriente.

- Que aparezca Jesús, los apóstoles y demás gente guay para que Protección Civil tenga raciones preparadas. Esto además sólo pasa en incendios grandes, con mucha movilización de recursos y larga duración. También ha de estar perfectamente separado de las raciones de la UME, que comen como en un banquete y son incapaces de darte algo aunque les sobre y tu tengas que esperar horas.

Luego, en los camiones siempre se lleva "la reserva", que son frutos secos, galletas, algunas latas... y las lembas de Hobb. Esto es lo que hay para saciar el hambre cuando no hay más remedio.

Otra fuente de alimento es la amabilidad de algunos vecinos de la localidad donde se desata el marrón. Aquí puede esperar de todo y acostumbrados a los palos y broncas que te ofrezcan algo de comer altruistamente al verte demacrado te saca una sonrisa que brilla por encima de cualquier rotros oscurecido por la ceniza.

En sentencia final, hay que entender donde se está y que no se puede comer en plan banquete o cosas que requieran mucha elaboración o presentación, así que la verdad, conociendo el caos que reina muchas veces no nos podemos quejar.
El mayor problema siempre es en incendios, tienes un desgaste enorme y no sabes cuando será la hora de comer; y os juro que he/hemos pasado verdadera hambre, algo que le da una lección a la vida para siempre y que te hace reir por lo bajo cuando escuchas a algún conocido ajento a todo esto "hay que hambre tengo" :).

Bon profit!